En mis paseos por Sevilla a lo que tanto me gusta, me encuentro con la bicicleta que veis en la foto.
Es en recuerdo a Sergio, un joven que un día regresaba a su casa en bici y a la altura de la Macarena, se vio sorprendido por un conductor ebrio atropellándolo y perdiendo su vida.
Sirva desde aquí aportar mi granito de arena hacia las conciencias de todos los que alguna vez se ponen delante de un volante. Para que lo hagan con el mismo respeto hacia los demás usuarios de la vía pública, que exigimos para nosotros. Pensad que un día fue Sergio, pero que la próxima victima podría ser tu hij@, tu herman@ o tu amig@|.
Respeta cuando conduzcas a los demás y hazlo limpio de alcohol y drogas. Que no haya mas Sergio
Baste decir que según los resultados de la autopsia el ciclista también iba ebrio, por eso cruzo la resolana sin mirar.
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